Confesionario

Después de mucho preguntar y preguntar me enteré que para poder reunir mi caja debía contactarme no solo con una persona si no con variar y así lo hice, todas estas personas tenían una de las partes que le darían forma a esa caja, mi caja, , que guardaría los incontables recuerdos, cosas fuera de este mundo.

La sorpresa que me lleve fue que al igual que la caja que estaba buscando estas personas tampoco eran de este mundo pues eran superiores sus almas brillaban más allá de lo normal al momento de ir por cada una de las piezas sentía algo especial al contactarme con ellos un escalofrío recorría todo mi cuerpo y una sensación de goce repletaba mi alma.

Luego de mucho recorrer recolecté todas las partes necesarias para construir mi caja y por fin pude empezar a construirla, varias horas del día, noches sin dormir, miles de llantos de desesperación por no poder unir las piezas y además de lo anterior debía tener mucho cuidado pues las piezas eran bastante frágiles y únicas al igual como lo que ahí dentro estaría, pero después de unos meses ya está., quedó perfecta, si ustedes pudieran verla se asombrarían de lo maravillosa y hermosa de ella.

Ahora procedo a introducir todos los recuerdos, mientras los voy guardando los miro, risas, carcajadas, suspiros, llantos, peleas conversaciones y miles de imágenes que pude observar.
Al ver todo lo que guardé, me hizo notar que al final de todo solo debo sacar cuentas alegres y nada de tristezas de aquello.

Ahora cierro la caja y decidí dejarla en un lugar a mano por si alguna vez necesito sacar una experiencia de ahí y porque de lo que hay allí dentro aprendí demasiado y creo honestamente que aún puedo seguir aprendiendo de todo eso.